Una semana y media de vigencia le queda a la Ley de Moratoria Previsional antes de ser derogada por el Gobierno nacional, tras haber decidido no prorrogarla. Esto implica que los trabajadores que no alcancen los 30 años de aportes ya no podrán acceder a la jubilación mediante esta ley. Esto motivó movilizaciones en todo el país y los jubilados sanjuaninos se sumaron al reclamo.
Con megáfono en mano y una mesa colocada en la esquina de Rivadavia y Gral. Acha, en la Plaza 25 de Mayo, un grupo de sanjuaninos pertenecientes a Jubilados de Izquierda concentraron con el propósito de informar sobre esta situación a la población y reunir firmas para un petitorio en rechazo a la decisión del Gobierno nacional.
“Impulsamos esta actividad porque el 23 de marzo queda sin efecto la Ley de Moratoria Previsional”, comenzó explicando José Mini, quien era el encargado de informar a la sociedad la situación con un megáfono. Y continuó: “Si se deroga esta ley, nueve de cada diez mujeres se quedarían sin poder jubilarse, y siete de cada diez hombres igual. Esto sucede porque la patronal no hace los aportes y porque la precariedad laboral nos lo impide”.
Cabe recordar que, aunque existía la posibilidad de extenderla por dos años, el gobierno nacional decidió no hacerlo, argumentando que el sistema se encuentra virtualmente quebrado. De acuerdo con datos de la Subsecretaría de Seguridad Social, entre enero y septiembre de 2024, el 74% de las 315.166 jubilaciones otorgadas en el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) incluyó moratoria. Además, casi la mitad de las pensiones también requirió de este plan.
Al respecto, Mini detalló: “Es mentira que al acceder a la Ley de Moratoria te regalan la jubilación, porque lo descuentan del propio haber jubilatorio. Los jubilados estamos acá para defender a los jubilados. Estamos por la continuidad de la ley y para tener acceso a la jubilación con un haber jubilatorio digno, gratuidad de medicamentos y atención en la salud que merecemos los jubilados”.
Las intenciones del grupo de jubilados es poder reunir la mayor cantidad de firmas posibles para poder enviar los petitorios a Buenos Aires, donde se realizará la concentración, con intenciones que sea la próxima semana, para llevar los pedidos al Congreso, con la esperanza de ser escuchados.
