Un grupo de jóvenes de la localidad de Spegazzini, Ezeiza, no sale de su asombro. Y es que encontraron el domingo 29 de septiembre un caparazón de un gliptodonte mientras estaban pescando en el Arroyo Alegre, en el barrio La Flecha. Éste es el segundo hallazgo similar en la zona dado que a un kilómetro de distancia, en diciembre de 2015, ya habían encontrado el mismo tipo de resto fósil en otro arroyo de la ciudad, ejemplar que ahora se encuentra exhibido en el Museo Regional de Tristán Suárez.
El hallazgo fue transmitido en vivo por las redes sociales del Canal Carlos Spegazzini, quienes dieron el aviso a las autoridades para proceder a la extracción y la preservación del mismo. Imanol Ojeda, parte del grupo de amigos que estaban pescando, fue quien les mostró a sus amigos el descubrimiento: “Estábamos pescando y metimos la mano y estaba el hueco éste. Lo venía escondiendo hace dos años y hoy se los mostré a los chicos”, dijo en el video transmitido por Facebook.
“Me contactó uno de los chicos del grupo que se ve en la filmación. Creo que no tenían idea de lo valioso que era y desde la inocencia guardaron el secreto durante dos años”, dijo a Infobae el periodista Martín Rodriguez.
En dialogó con el paleontólogo al que se notificó del hallazgo, Oscar Vique, de la reserva paleontológica de Marcos Paz, aseguró que este acontecimiento es muy importante porque el fósil está en un estado único. “Estoy en el lugar junto con la policía para cuidar la integridad de lo hallado que se encuentra en un estado casi perfecto, teniendo en cuenta la cantidad de años que pasaron. Ya notificamos a Patrimonio de Nación, al Museo de La Plata y yo estoy en representación del área de arqueología como grupo extractor de fósiles”, aseguró a Infobae Vique.
Las hipótesis que se manejan a esta hora, según explicó el paleontólogo, es que por la posición en la que se encontró al animal, se cree que fue a buscar agua al arroyo y se hundió por su peso hasta morir: “La forma en la que se encuentra la posición deja en evidencia que el animal fue en busca de alimento y de agua. Al pesar más de 2 toneladas, no pudo salir con vida del hueco en el que se metió”.
Para extraerlo de manera optima pueden tardar hasta 10 o 15 días: “Es un material muy frágil así que pedimos que si la gente se acerca no lo intente tocar porque lo puede dañar y es un patrimonio muy importante”, comentó Vique.
Fuente: INFOBAE