En conversación con Canal E, el economista, Federico Glustein, evaluó las recientes decisiones financieras del gobierno y advirtió sobre los riesgos de una tasa de interés elevada frente a una inflación que se mantiene estable.
El mercado mostró confianza, pero la tasa preocupa
El especialista explicó que la última licitación del gobierno fue bien recibida por los inversores. “Fue una solicitación del gobierno que postergaba más del 100% de los vencimientos, lo que muestra que el mercado tiene cierta tranquilidad respecto a la tasa que ofreció”, señaló Glustein.
El economista precisó que se trató de una tasa mensual efectiva de entre 2,5% y 2,6%, con una tasa anual del 35% al 36%. “Podemos decir que hay una estabilización de algunas variables, entre ellas la tasa de interés que ofrece el gobierno para las licitaciones y los boncaps”, destacó.
Sin embargo, aclaró que no todo es positivo. “Si bien es algo favorable porque ordena la macro, la tasa de interés que está pagando el gobierno es alta”, advirtió. Según Glustein, mientras la inflación proyectada ronda el 20% anual, el Estado está abonando intereses 15 puntos por encima de ese valor. “Estamos pagando 15 puntos de sobrepeso, lo cual es una realidad muy alta para un país con vencimientos permanentes”, subrayó.
El desafío, explicó, será administrar los vencimientos de diciembre y enero —40 y 20 millones de pesos respectivamente— sin generar excesos de liquidez que desestabilicen la economía.
Inflación estable y un programa económico aún incompleto
Respecto al dato de inflación que el INDEC difundirá la próxima semana, Glustein anticipó que “se espera una cifra del 2,1 o 2,2%, con una eventual aceleración para el mes corriente”. Aseguró que el incremento de precios en alimentos, energía y combustibles hacia fin de mes presionó sobre el índice, frenando la tendencia bajista.
“La inflación se mantuvo altamente estable porque hubo alzas en servicios, gas, carne y energía eléctrica, y eso termina impactando negativamente”, explicó. Para el economista, el reto del gobierno será retomar la senda de desinflación y llevarla al 1% mensual en un plazo de 8 a 10 meses, sin alterar otras variables sensibles.
Glustein también se refirió a los desafíos estructurales de la gestión. “El principal desafío es ver cómo llega a concretar el préstamo del Tesoro norteamericano y el swap para resolver la deuda externa del año que viene”, indicó. Y agregó: “Hoy entramos en una virtual recesión con un esbozo de pequeña recuperación, pero todavía no hay nada sostenible”.
A su juicio, el gobierno necesita un plan más integral. “No se ve un programa económico de sustentabilidad; sí se ven medidas para resolver variables como la inflación o el superávit fiscal, pero falta una estrategia productiva de mediano plazo”, concluyó.


