El juicio por la desaparición forzada de Raúl Tellechea, que captó la atención de San Juan y de todo el país, avanza hacia su etapa final. Esta semana, con la lectura de los alegatos, se marcó un punto decisivo en la búsqueda de justicia para un caso que lleva años de lucha e incertidumbre. Conrado Suárez Jofré, abogado querellante, brindó su perspectiva sobre el estado de la investigación y las dificultades que han acompañado el proceso.
“Estamos en la recta final, decisiva y más contundente”, expresó Suárez Jofré, quien anticipó que las defensas se opondrán con fuerza a los argumentos presentados. Sin embargo, el abogado subrayó la naturaleza compleja del delito en cuestión, señalando que “es muy complejo llegar a la verdad en un delito que presume la borradura, el ocultamiento y la desfiguración de los hechos”. Según Suárez Jofré, este tipo de delitos no solo involucran la privación de la libertad, sino también la falta de información, lo que dificulta aún más el esclarecimiento de los hechos.
“En todos los delitos hay dos partes, y una se defiende mostrando las cosas como no han sido. Pero en este delito, en particular, es muy importante tener en cuenta que no es solo la privación de la libertad, sino que ese accionar es seguido por la falta de información”, explicó el abogado. “Hay que demostrar que la falta de información tiene que ver con el accionar de los imputados, que es lo que estamos demostrando”, agregó.
El letrado también destacó la falta de respuestas por parte de los acusados a lo largo del proceso judicial. “Nadie se los preguntó nunca en muchísimos años, cuando se los íbamos a preguntar ahora, sabiendo perfectamente que había elementos, no respondieron preguntas”, señaló Suárez Jofré, haciendo referencia al silencio que ha caracterizado a los imputados. De todos los acusados, solo uno respondió y se limitó a decir: “Pregúntenselo a ellos, yo no he participado en eso”.