A solo dos semanas de la aprobación de la Ley de Financiamiento Universitario en la Cámara de Senadores de la Nación, el presidente Javier Milei prepara el veto inminente de esta norma, lo que desató una nueva ola de protestas en el sector educativo. La ley, que contempla la actualización del presupuesto de las universidades nacionales y la recomposición salarial de docentes y nodocentes ajustada a la inflación, quedará suspendida, según lo anunciado por el mandatario.
Ante esta situación, los gremios y asociaciones que representan a los trabajadores del sector universitario han decidido intensificar su plan de lucha, confirmando un paro de 48 horas para esta semana, que se llevará a cabo los días jueves 26 y viernes 27 de septiembre.
En San Juan, la filial provincial del gremio ADICUS, que agrupa la mayor cantidad de trabajadores universitarios, ya ha ratificado su adhesión a la medida, mientras que otras organizaciones sindicales se sumarán en las próximas horas, como ha sucedido en paros anteriores.
Jaime Barcelona, secretario general de ADICUS, afirmó en declaraciones radiales que la situación económica del país ha deteriorado aún más las condiciones de los docentes, impulsando una mayor adhesión a las medidas de fuerza. “El apoyo de los estudiantes también ha crecido, ya que la inflación afecta directamente a la comunidad universitaria”, señaló Barcelona.
Además del paro, el 2 de octubre se realizará una nueva Marcha Federal Universitaria en todo el país, con epicentro en Buenos Aires. Esta manifestación será la segunda en lo que va del año, tras la masiva protesta de abril, que también tuvo una fuerte repercusión en provincias como San Juan.