Se trata de Diego Fernando Quiroga, un juvenil nacido en la Sierra Maestra de Jáchal, quien actualmente juega en la Reserva y la Local de San Martín, con grandes chances de emigrar al exterior.
POR PABLO KARKI
Hace 2 días Muchas veces los sueños se hacen realidad y, para Diego Quiroga los sueños se están haciendo realidad. Desde chiquito empezó a patear una pelota y según su padre Pablo Valentín Quiroga, ya se notaba que le iba a gustar jugar al fútbol.
Nació en Niquivil, la ciudad de ingreso al departamento Jáchal. Cuando tenía 9 años solamente, fue hasta el club de su lugar de nacimiento, Niquivil, club que milita en la primera del fútbol jachallero.
Diego tiene 20 años, es hijo de Pablo Valentín y de Cecilia Farías, además tiene dos hermanos como Cinthia y Pablo Ezequiel Quiroga.
Allí en Niquivil jugó un tiempito nomás y luego emigró a uno de los clubes más importantes de Jáchal como Argentinos de La Florida, los Populares Caranchos. Siempre se desempeñó en la zona de volantes, lo puede hacer como cinco, doble cinco hasta incluso de enganche.
En los Caranchos estuvo hasta los 14 años, en ese tiempo fue quien por entonces estaban a cargo de las inferiores de San Martín como dos históricos del Verdinegro, el “Roly” Rodolfo Rodríguez y el “Beto” Alberto Naveda, más el coordinador Marcelo Vivas.
Allí lo vieron en una prueba y sin dudarlo lo convocaron para entrenar en San Martín. Fue tan bueno lo que hizo, que cuando Diego tenía 16 años, ya fue visto y convocado por el técnico de la Primera en ese momento Pablo Lavallén para entrenar junto al plantel mayor.
En ese tiempo, San Martín hizo un par de amistosos de pretemporada contra Gimnasia de Mendoza que estaba en la B Nacional, allí jugó también Diego, quien fue visto por el cuerpo técnico y dirigentes mendocinos, se lo quisieron llevar a jugar al Lobo, pero finalmente no se pudo dar.
Ahora, con 20 años, juega en la Reserva de AFA del Verdinegro y también en la Primera Local, aunque en este mundo del fútbol actual, la gran mayoría de los jugadores tiene su representante, quien lo maneja a Diego tiene pensado llevarlo al exterior, específicamente al Club Deportivo Santaní, es un club de fútbol de Paraguay, que milita en la Primera División. Tiene su sede en la ciudad de San Estanislao, en el Departamento de San Pedro.
Pero Diego no quiere encandilarse con las luces del éxito, quiere ir paso a paso en el crecimiento de su carrera, pero su sueño de llegar a Primera lo tiene intacto al igual que su categoría para desempeñarse en la mitad de la cancha.
Ese sueño que se forjó en su Niquivil natal, está intacto y en cualquier momento pegará el salto que realmente se merece por su gran condición de futbolista.
Fuente: Diario Huarpe
Redacción Jáchal Digital
