El cardenal australiano George Pell, ex número 3 del Vaticano, fue condenado este martes a seis años de prisión por cinco delitos de pederastia contra dos menores, ocurridos en los ’90.
El juez Peter Kidd, de la corte de Melbourne, dijo que al definir la sentencia tuvo en cuenta los delitos “horribles” y la avanzada edad (77 años) del religioso.
Pell se enfrentaba a una pena máxima de hasta 50 años. Deberá cumplir tres años y ocho meses de la condena antes de pedir la libertad condicional.
El cardenal, que insiste en su inocencia, se presentó ante la corte después de haber sido considerado culpable por cinco crímenes sexuales contra dos niños en 1996 y 1997.
El religioso -vestido con una camisa negra pero sin el tradicional collar clerical blanco- se mantuvo sentado e impasivo, mientras el juez Kidd describió los ataques contra los dos monaguillos.
“No vivirá lo suficiente para ser liberado”, dijo el magistrado al leer la sentencia. Además, fue considerado culpable por arrinconar a los dos niños, que entonces tenían 13 años y eran becarios del prestigioso colegio St. Kevin, y abusar de ellos en diciembre de 1996.
No fue la única vez: el ataque se repitió con uno de los dos niños apenas dos meses más tarde. “Hay un nivel adicional de degradación y humillación que cada una de sus víctimas debió sentir al saber que el abuso que sufrieron fue visto por el otro”, dijo el juez. Uno de los jóvenes que sufrió los abusos murió por una sobredosis de heroína en 2014.
Pell es el más alto representante de la jerarquía católica en ser condenado por abusos sexuales contra menores de edad.
Hasta hace poco era responsable por las finanzas del Vaticano. Este miércoles, sin embargo, el juez Kidd insistió en que era el cardenal Pell y no el Vaticano el que había sido condenado.