A ocho días de la desaparición de Lian Flores, los investigadores se desplazaron a Villa María, en Córdoba, a unos 30 kilómetros de la zona cero, en Ballesteros Sud, donde fue visto por última vez el niño de 3 años.
Fuentes del caso confirmaron a Infobae que la Policía de Córdoba allana un cortadero de ladrillos de la comunidad boliviana. En el procedimiento participa Gendarmería, la fuerza de seguridad que presta colaboración en la búsqueda. Además, trabajan con canes y drones.
Al sitio, que está ubicado cerca de la ruta 9 y a unos 20 minutos del centro de Villa María, asistieron los fiscales provinciales Isabel Reyna y Nicolás Gambini y la fiscal federal de Bell Ville, Virginia Carmona. También se encuentra el ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, indicó TN.
En diálogo con la presa, el funcionario cordobés indicó que se trata de “un punto de interés” y precisó que se allanan 16 viviendas del lugar, entre ellas, las de los propietarios de dos camionetas que fueron secuestradas el domingo pasado.
La abogada María Eugenia Nebreda aseguró que sus clientes “nunca estuvieron ahí”, en referencia al campamento de ladrillos donde desapareció Lian.
De acuerdo a la penalista, los investigadores llegaron a ellos tras algunos testimonios tomados en las primeras horas. Las personas que declararon señalaron que habían visto una camioneta blanca merodeando la zona donde fue visto el nene por última vez.
“Los vehículos coinciden con la descripción que hicieron los testigos”, puntualizó y aclaró que esta circunstancia no confirma que se trate de la misma camioneta.
Luego del secuestro de las camionetas, “se presentaron de forma espontánea”, detalló Nebrada quien reveló que el lugar ya había sido allanado en 2014 en el marco de una causa de trata de personas con fines de explotación laboral que, según afirmó, no prosperó.
El niño de 3 años visto por última vez el 22 de febrero en la localidad rural de Ballesteros Sud, provincia de Córdoba. La búsqueda del menor continúa sin resultados concretos, mientras el operativo se extiende y las autoridades no descartan ninguna hipótesis.
El caso impactó en la sociedad y generó una intensa movilización de fuerzas de seguridad. Más de 300 efectivos participan de los rastrillajes, que abarcan un área de más de 4.000 metros alrededor de la vivienda del niño. La investigación se maneja bajo estricto secreto de sumario y, aunque se realizaron allanamientos y se secuestraron vehículos y teléfonos, aún no se obtuvieron pistas certeras sobre su paradero.
Desde el jueves, se ofrece una recompensa de 20 millones de pesos para quienes aporten información útil y verificable sobre el paradero de Lian. La suma se divide en partes iguales entre el Ministerio de Seguridad de la Nación y el Gobierno de Córdoba. Cualquier dato relevante puede comunicarse de manera anónima al 134.
Lian Gael Flores Soraide mide aproximadamente 90 centímetros de altura, tiene tez trigueña, cabello corto oscuro y ojos oscuros.
“Yo pido que aparezca por favor. No sé si será alguna venganza o qué sé yo, pero que aparezca mi niño, porque es un niño tranquilo”, reiteró su papá Elías, en medio de la desesperación.
FUENTE: Infobae