¿Por qué comprar en la Asamblea Rural de Jáchal?
Por Cristian “Pin” Esquivel – Gastronómico
Seguramente han pasado muchas cosas en nueve años. Cosas buenas y malas. Vaivenes económicos, luchas por los espacios, traslados truncados, inclemencias climáticas, apoyos y desprotecciones. Pero hay algunas que nunca cambiaron: las ganas de trabajar y los sueños de prosperidad. Hace nueve años que se instaló el primer stand de productos naturales y artesanales en el centro jachallero, erigido por los miembros de la Asamblea Rural de Jáchal. Desde ese instante cada viernes nos acercan productos de primera calidad. Pero la pregunta es ¿Qué hace que un negocio de esa envergadura se mantenga tanto tiempo? Sin lugar a dudas la respuesta está en los métodos de producción.
Los alimentos ecológicos, como se los llama actualmente, se los produce:
- Protegiendo y mejorando la fertilidad natural del suelo
- Empleando fertilizantes naturales y el nitrógeno fijado por las plantas leguminosas
- Cerrando los ciclos de nutrientes a través del uso de abonos orgánicos y residuos de los cultivos
- Empleando el control biológico de plagas y enfermedades, en vez de pesticidas
- Promoviendo la alta biodiversidad y los insectos beneficiosos
- Con control mecánico de las malas hierbas (sin herbicidas)
- Con animales mantenidos al aire libre, con acceso regular a pastos
- Con una ganadería que no hace uso rutinario de antibióticos ni de promotores del crecimiento
- Con mucho menor riesgo de contaminación del agua
- Sin organismos genéticamente modificados
Los alimentos elaborados según las normas de producción ecológica, en comparación con los alimentos convencionales:
- Contienen menos aditivos
- No contienen edulcorantes, estabilizantes ni conservantes
- No contienen glutamato añadido como potenciador de sabor
- No contienen colorantes
- No contienen sabores artificiales
- No contienen grasas hidrogenadas
- No contienen pesticidas
Como jachalleros debemos defender y apoyar estas formas de producción que favorecen la economía y protegen la salud de la población.
No debemos olvidar que en cada producto que se ofrece hay un esfuerzo familiar que comienza muchos días antes de la exposición. Actividades tales como: siembra, desmalezamiento, regadío, cosecha, acopio, fraccionamiento, traslados y venta son realizados por sus integrantes. Al igual que en la elaboración de masas, dulces, conservas, vinos, comidas, las tareas y el trabajo son divididos.
Debemos ser conscientes de que somos lo que consumimos, si hay ingesta de productos sanos, seguramente tendremos una comunidad sana.
