Si hay algo que tiene San Juan es talento nato. Sea en la disciplina que sea, hay cientos de personas que destacan por sus capacidades, creatividad, empeño y granas de progresar. La Cooperativa Teatro de Arte es uno de esos espacios donde el talento de los sanjuaninos florece, y en esta oportunidad será de la mano de la sanjuanina Tania Leyes y del cordobés Luciano Delprato, quienes establecieron una alianza con un único objetivo: crear una obra de teatro que esté en otro nivel.
Tiempo de San Juan dialogó con Luciano, quien está a cargo de la dirección de la obra “El Museo del Vino”, un trabajo teatral que se estrenará este fin de semana. En la previa, compartió algunos detalles de lo que fue el proceso creativo, con la particularidad de un abordaje que se extendió en el tiempo y el espacio.
El Museo del Vino es un trabajo que dramatúrgicamente viene llevando a cabo Tania hace unos 15 años, de acuerdo a lo que precisa Luciano. Es un material de escritura que tuvo sus cambios y matices, como una especie de maceración que fue lenta, hasta tener la madurez suficiente para poder pasarlo por el cuerpo y subirlo a escena. “En el mundo del teatro independiente las producciones llevan años hasta encontrar los fondos, los momentos, las voluntades de tanta gente para abordar este material que es súper complejo”, reflexiona el cordobés.
El vínculo de Luciano con la provincia no es nuevo. La primera vez que llegó a tierras sanjuaninas fue hace una década atrás, y desde entonces viaja con frecuencia desde Córdoba para brindar distintos talleres de teatro como participar de distintas actividades relacionadas al arte escénico. En ese mundillo conoció a Tania y supo sobre el texto y la idea que venía trabajando, con el foco puesto en lo territorial, en el desierto, las montañas y las fincas de parrales características de zonas viñateras.
“Es un proyecto que se viene desarrollando hace mucho y vengo acariciando la idea de poder hacerlo desde hace bastante”, comentó.
Gracias a la Ley de Mecenazgo, el proyecto que le da realidad a esta obra de teatro dejó de ser una idea en papeles para ser una realidad sobre tablas. El proceso de construcción comenzó hace un año y medio aproximadamente, con una metodología de trabajo un tanto atípica para algunas personas, pero común en los universos artísticos que derriban fronteras. Luciano viajó una vez al mes durante alrededor de 18 meses para dedicarse de lleno a la dirección.
Así, se ejecutaban jornadas intensivas de trabajo donde cada uno de los 12 actores que estarán en escena fue descubriendo su personaje y construyéndolo en base a un texto y las cadencias que se buscaba dar en una obra que procura evidenciar las problemáticas locales desde un punto de vista poético y contemporáneo.
Por fuera de los 12 artistas que estarán poniendo el cuerpo en escena, detrás de ellos hay más de una decena de trabajadores locales que se desempeñaron en distintas áreas, donde se sumó hasta un enólogo. Y acá es donde se encuentra el detalle característico, peculiar y original de esta propuesta teatral.
“La presencia del vino fue una decisión que fue decantando, apareciendo en el vínculo que tiene el espectáculo con la comunidad y la interacción del enólogo por vínculos socio afectivos naturales con el grupo, comunes en una sociedad como la sanjuanina”, explica Luciano. Así fue como se incorporó al equipo el enólogo Marcelo Onofri, quien elaboró un vino Malbec especial solo para la obra, con un número limitado de botellas, haciendo de cada una un tesoro especial.
image.png
La idea surgió al pensar el programa de mano en un formato por fuera del folleto o la presentación digital. Resultó interesante llevarlo a una botella, y si la botella tenía vino, siendo una obra que habla de este alimento nombre, mejor. Luciano analiza lo interesante de la propuesta no solo por la novedad en sí misma (ya que con cada entrada el espectador se lleva una botella) sino porque de cierta manera invita a vivir la experiencia teatral de una manera expandida en el tiempo, ya que el vino se puede consumir días, semanas, meses y hasta años después del estreno, haciendo que la obra perdure.
Así, combinando las bondades del vino con el maravilloso mundo del teatro, sumando dedicación y tiempo, se obtuvo “El Museo del Vino”, que estará viendo la luz ante el público este sábado y domingo, a las 21 horas, en Cooperativa Teatro de Arte (O Higgins 501 Capital) Para solicitar entradas se pueden contactar al 2645724340.
El Museo del Vino, la obra donde se vive el “realismo mágico cuyano” en primera persona
Sin spoilear lo que se podrá disfrutar, El Museo del Vino es la historia de una familia sanjuanina que está directamente vinculada al mundo vinícola, desde el inicio de su proceso productivo hasta la venta. Ante las adversidades que a todos los productores de vino les ha tocado atravesar al menos una vez, esta familia se ve en la presión de tener que vender las tierras que albergaban las uvas y para no perder la esencia familiar, deciden abrir un museo del vino.
“Termina siendo un museo de sus propias infancias, del pasado, y ese pasado de esa familia viñatera se transforma en la identidad cuyana sanjuanina. Es una obra sobre la relación de la memoria, la familia y el territorio”, explica Luciano.
Y continúa: “La dramaturgia de Tania pasa por momentos hilarantes, absurdo en su comicidad desfachatada. Tiene toques del teatro del absurdo y de un “realismo mágico cuyano”. Debería ser un espectáculo inclasificable”.
El Museo del Vino y su arribo a Córdoba
La llegada de la obra sanjuanina a la provincia de las sierras y el folklore llega de la mano de Luciano, quien tiene sus espacios en Córdoba y sumó la propuesta local a un ciclo de teatro.
Se trata del Ciclo de Teatro de Producción Interprovincial “Cimarrón”. Este ciclo busca visibilizar, fortalecer, crear y poner a disposición redes afectivas, poéticas y laborales de las artes escénicas. En esta oportunidad el cruce de provincias contará con representantes de Córdoba, San Juan, La Rioja, CABA y Rosario. El Museo del Vino no será la única obra sanjuanina que participará de este ciclo, ya que estará también Luisa, de Lanotanegra Teatro, y Nunca más mamá te vayas, de El Invernadero Teatro.
La particularidad es que El Museo del Vino participará del ciclo con dos funciones sobre sus espaldas, lo que sin duda será un doble debut interprovincial, ya que la función está prevista para el 31 de mayo.
image.png
Estas posibilidades de generar lazos con colegas de otras provincias, como salas, permitirá al teatro independiente “del interior” poder achicar las distancias, derribar fronteras y barreras geográficas para la creación en conjunto, creando una gran red teatral.
El Museo del Vino y quienes hacen posible que la obra sea una realidad – Ficha Técnica
- En escena: Ruth Ovin, José Annecchini, Julián Riveros, María José Barbero, Marcela Barber, Andrés Masi, Pilar Murcia, Estela Rodríguez, Quique Villafañe, Gema Vera y Fabricio Saquilán.
- Diseño y realización de caracterización y vestuario: Melina Echevarría.
- Asistencia de caracterización: Milagros Espejo.
- Confección de vestuarios determinados: Resguardo Laboratorio.
- Asesoramiento de diseño: Estefanía Kaluza – Las calzas de Molière -.
- Utilería: María de los Ángeles Carbajo
- Restauración de escenografía: Diego Vicentini
- Operación y diseño lumínico: Fernando “Jáchal” Torres.
- Composición e interpretación sonora: Julián Riveros y María José Barbero
- Producción: Cooperativa Teatro de Arte, Fabricio Saquilán, Julián Riveros
- Responsable de sala: Mónica Calvo
- Meritoria de régimen de promoción cultural/ Mecenazgo 2024: Tania Leyes
- Gráfica de etiqueta y marca: Luna & Compañía
- Elaboración de vino de autor: Marcelo Onofri Enólogo
- Asistencia coreográfica: Memé Claudeville
- Idea y dramaturgia: Tania Leyes
- Dirección: Luciano Delprato
